lunes, 28 de mayo de 2012

La bofetada de Maldonado a su sponsor



Pastor Maldonado, ese venezolano corredor de toda la vida, habiendo alcanzado el campeonato de la GP2 en 2010, era natural candidato a piloto de la máxima categoría del automovilismo: La Fórmula 1. Si Lewis Hamilton ha subido las mismas escaleras y fue campeón de la categoría en 2008, ¿Qué hace a nuestro Maldonado menos capaz?
En nuestro país, esa polarización política que hace que toda acción del gobierno tenga la aprobación de la mitad de la población y la desaprobación de la otra mitad, no se ha podido disfrutar a plenitud de los triunfos de muchos compatriotas por el solo hecho de asociar, aunque sea tangencialmente,  a los protagonistas con el gobierno nacional.

La decisión de PDVSA (Empresa petrolera del Estado venezolano) de patrocinar la participación de Pastor Maldonado en la Fórmula 1 con la escudería Williams ha generado no pocas críticas desde la oposición política venezolana ya sea de grupos o individualidades.
Argumentos como ¿Cuántos hospitales se pueden equipar, cuando no construir, con todo ese dinero? y cosas por el estilo, han sido esgrimidos de manera, digo yo, muy simple porque si bien es cierto que los hospitales deben estar surtidos también es verdad que la vida de una nación no sólo se compone de tangibles sino también de intangibles como es la formación de paradigmas e iconos de toda índole.

A ver si me explico. Si por la crítica de aroma político que han sufrido Gustavo Dudamel  y el Maestro Abreu se dejara de dar apoyo económico al Sistema de Orquestas Juveniles argumentando además que se podrían construir tal número de escuelas, estaríamos perdiendo la oportunidad de producir esos ejemplos de vida que constituyen desde Dudamel hasta el volcán del Caribe (Un niño que aún no llega a los 10 años y es un fenómeno de la percusión) ejemplos estos que si bien configuran un intangible, luego de 30 años del proyecto, sabemos que son tan necesarios como la propia planta física escolar.
Como seguidor de la Fórmula 1 desde hace ya unos años, da mucha alegría poder tener un estímulo adicional como lo es un compatriota en esa parrilla de 24 autos que se desplazan a velocidades que deformarían el rostro de no ser por el casco casi hermético de uso obligatorio.

Creo que la colocación de ese dinero en el patrocinio de Pastor Maldonado es una garantía de su uso. Quiero decir, si sintonizamos cada fin de semana de competencia podríamos ver en directo y en tiempo real la manera cómo se materializa en pista y cómo se aplica en avances que a un ojo desprevenido  parecerán lentos o pequeños pero que nunca es así. En Fórmula 1 hasta las derrotas producen avance y de eso se trata.
Ahora bien, después de tantos años de esta situación de polarización no puede uno hacerse el loco y decir que los demás sí pero uno no. Pues yo creo que realmente Maldonado ha hecho méritos para que medio país no lo quiera, declarando con slogan de Patria, socialismo y otros etcéteras. Es fácil entonces, desde el resentimiento, destilar desprecio diciendo: “vieron, perdió otra vez” pero los más ruidosos son los tuiteros que sin saber nada de la F1 creen que hay que ganarlas todas y siempre. No saben que se puede ser campeón sin ganar ninguna carrera pero manteniéndose en los podios y sumando puntos. Hubo una tuitera que este fin de semana decía “Maldonado abandonó otra vez” y lo decía como una noticia fresca mientras veía la carrera en TVES en diferido, en fin…

Si en toda competencia deportiva el factor suerte siempre está presente, no podemos soslayar el hecho de que hay que tener alguna “contra” cuando se entra en roces con nuestro “Alto Gobierno” porque, vamos a estar claros, de que es pavoso es pavoso. Esto queda demostrado en  el hecho de que en las carreras previas de esta temporada la actuación de Maldonado ha sido en general buena y en la mayoría por cuestiones fortuitas hubo de retirarse. En una de ellas, en la última vuelta, el auto se quedó parado por mecánica casi llegando a la meta y en posición de puntos.

La peor bofetada que Pastor Maldonado pudo darle al gobierno en tanto patrocinante es haber ganado en España. Ese podio, con el venezolano en lo más alto, flanqueado por dos campeones mundiales que lo alzaron en hombros (Cosa que nunca había visto en todos los años que llevo viendo la F1) Hace visible en transmisión satelital a todo el mundo la contradicción ideológica de este régimen.
Cómo puede explicar un gobierno que se define como socialista, con un modelo como el cubano, la participación en el negocio de la Fórmula 1 que es la más excelsa expresión del capitalismo mundial. Cómo queda la formación del hombre nuevo con modelos de elitismo y derroche casi necesarios en las individualidades que participan en ese negocio comenzando por los pilotos que son los más visibles y mediáticos. Por qué el patrocinante  PDVSA, que además está asociado al ejecutivo directamente en tanto que su presidente es al propio tiempo Ministro de Energía, no se convierte en modelo de altruismo entregando el dinero del patricinio pero sin exponer el logotipo y que en su lugar sólo se exhiba la bandera nacional. Todo lo contrario, el logo está en el pecho del piloto y en el alerón trasero del auto, espacios no sólo caros muy caros, sino los de mayor exposición a la publicidad, ese monstruo maldito del capitalismo.
Estas contradicciones son las que mantienen a Venezuela vacunada contra la consolidación de estos modelos fracasados. Pero no sólo la vacuna nos salvará, también hay que cuidarse.
Fui muy feliz con la victoria de Maldonado en el Gran Premio de España, carrera ganada en muy buena lid y con un derroche de talento incontestable. Para ganar en la F1, todo, pero todo, debe salir bien durante el fin de semana y eso fue lo que pasó. 

A mi interior y pensando en la suerte, creo que alguna forma de exorcismo se hizo en Williams, pero una vez ganada la carrera, felicitado desde Miraflores en caliente, multiplicada la acción desde el discurso oficial a todo nivel, a las pocas horas y aún en plena celebración, un pequeño accidente produjo un incendio, que si bien no fue de consecuencias a lamentar, sí provocó un buen susto. De que vuelan, vuelan.

Este domingo se corrió el Premio de Montecarlo. En un acto más de coherencia ideológica, el gobierno nacional, que mantiene un control de cambio asfixiante, ofreció paquetes para viajar al Principado sin tocar lo que aquí llamamos el cupo CADIVI y que sólo los venezolanos entendemos a bote pronto. Esa cantidad de compatriotas que agotaron los boletos ofertados en esta excepción para acompañar a Maldonado en esa carrera, creo que se convirtieron en los mensajeros de los influjos originados en Caracas. No obstante la buena actuación de Maldonado durante el fin de semana y haciendo los tiempos para llegar a la Q1, un par de sanciones lo colocaron en la última fila de partida y aunque ciertamente, en Mónaco es bien difícil adelantar, ese pedazo de otro vehículo que lo fue a buscar para que lo pisara y terminara en su retiro apenas comenzando la primera vuelta, parece decir que habrá que comenzar el exorcismo de nuevo.










Por lo pronto, ya Pastor Maldonado entró en la historia del deporte nacional y a la vuelta de unos años, cuando todo este mal tiempo pase, estoy seguro de que el orgullo reposado nos abarcará a todos y entonces sí, Todos seremos Pastor

Caracas, mayo 2012.

Condones con Viagra… ¿No es como mucho?


Leí una noticia en twitter de la que no pude ver el desarrollo porque el link no abría desde mi teléfono. Yo quiero creer que era el link, pero mi nieta insiste en que es mi teléfono y que se dice celu. En fin, la noticia en cuestión informaba que estaban por aparecer unos condones con viagra.
Mirando fijamente (como bobo, más bien) a la pantallita del celu mientras abría el link, (cosa que nunca sucedió) cayeron en cascada imágenes asociadas: viagra-droga-condón-dediles… y digo yo, eso no sólo está inventado sino que además creo que penado y perseguido, ¡así que mosca muchachos!
El viagra, en tanto droga, debe ser capaz de provocar la muerte bien sea por automedicación, mala praxis, sesión de prueba y error en el más puro estilo Dr. House, sobredosis, mala leche, en fin… lo que sí, es que definitivamente sería una muerte muy particular. En principio, el tema esotérico del paso hacia la luz blanca encandilante ahora se trocaría en azul pastilla pero eso sí, la cara del “beneficiado” seguiría siendo de bobo aletargado en el más puro estilo Ghost Wishperer.

Laureano Márquez en un alarde de ingenio dice que las mujeres siempre han fingido los orgasmos y que ahora con el Viagra los hombres podemos fingir las erecciones. Pero ante la muerte sobrevenida en estas circunstancias, de lo que se trata no es de fingir sino de disimular. Es más, habría que tomarse un tiempo para la entrega del cadáver al velatorio, digo, podría haber problemas para el cierre del féretro dado el “rigor mortis localizado”. Pero, en caso de cremación bajaría el riesgo de accidentes porque siempre una mecha más larga es más segura, según recomiendan los bomberos.

La gente está como desatada. Al momento de escribir esto llega por twitter otra noticia originada por @COOLCHANNELTV que anuncia  “Hacen música con condones”. ¿Qué clase de noticia es ésta? Digo yo, amén de la incomodidad que supone.   
En estos tiempos de destape asumo como una bendición mi condición de adulto mayor amante de los libros y la literatura, apasionado de la música, seductor de aves urbanas que comen en mi balcón, es decir, de anciano.

En uno de mis cada vez más frecuentes paseos por Locatel (Esa suerte de Corte Inglés de las medicinas al que ya me afilié y todo) observaba a un hombre de unos 55 años en el trance de comprar preservativos. Y digo trance, porque el pobre hombre que había llevado un feliz matrimonio desde muy joven, por cuestiones médicas y de retiro temporal del “aparato” de su mujer, se veía en la necesidad de adquirir algunos de estos profilácticos. En un arrebato de confidencia (Las canas y la espalda doblada generan esa confianza) me contaba que la última vez que compró uno de éstos, fue en la época en la que uno entraba en la farmacia como mirando a las gradas y en el mejor momento: sin clientes y con un dependiente hombre entre señas y eufemismos se pedía el producto. Además, decía él, la única marca que se conocía era el Sultán, imagínese.

Parado ante aquel stand exhibidor de colores de intensos a pasteles, en cajas, paquetes y sobres, con diagramas e instrucciones, el hombre estaba perplejo. Y es que más allá de las instrucciones básicas, algunos traen como las sopas maggi, una especie de receta recomendada.
El mismo stand contiene lo que llamaríamos “mercancía temática”. Lubricantes de todos los colores, sabores, composiciones: base agua, no derivado de petróleo; temperaturas... Sí, había uno de llamas rojas desde la base hacia arriba, que para evitar dudas se llama HOT. 

Prometía calentar al contacto. Al leer “al contacto” ya da un escalofrío, en mi caso, evocativo y nostálgico. Más arriba y en una fila horizontal estaban unos adminículos que entre la mala traducción, la intuición y la memoria, supusimos que eran unos anillos para colocar en “Dios me cuide el lugar” y otros para el dedo que, según, poseen una batería con duración de tres horas. Apretamos uno al descuido y juro que temblaba. Cuando le conté a mi nieta me dijo que el que temblaba era yo, que el aparatito vibraba. Supongo que alguien se lo habrá explicado.

Qué maravilla es el desarrollo tecnológico que hace las baterías cada vez más pequeñas. Creo recordar, ahora que lo pienso, que Da Vinci tenía un diseño para uno de estos aparatitos (él siempre tan adelantado) sólo que ése era a pedales.
Volviendo a mi confidente ante el stand, me decía: “la verdad es que de los Sultán a este despliegue, la distancia es como de los Parques de bolsillo de Doña Alicia de Caldera al Disney World de Walt Disney”.
Descubrimos que compartíamos una duda existencial. Por qué el paquete mínimo de preservativos contiene siempre 3  piezas. Llegamos a la conclusión de que uno siempre falla, se rompe o sale disparado como liguita y nunca hay tiempo ni luz para buscarlo, el segundo que acierta y el tercero, para que crean. Cuando uno va a un hotel de alta rotación deja los tres empaques rotos descuidadamente a la vista a manera de alarde, digo yo.
Mi circunstancial amigo, este muchacho de 55 años, finalmente se decidió por unos bajo el criterio de los colores sin mayores extravagancias. En efecto desechó los que venían en caja con tres dibujos que parecían esculturas de vanguardia. Yo le advertí, vaya con cuidado con éstos, que si calza, aprieta y marca y si no calza deprime.
No se atrevió mi amigo con los adminículos esos que tiemblan, perdón, que vibran. A lo que sí se animó fue a colocar en su cesta un tubo del HOT lubricante, dijo que si calentaba demasiado podría usarlo en las cerraduras y bisagras que siempre hace falta.
Nos despedimos y se dirigió a las cajas de pago pero sin que lo abandonara la sensación evocativa de la vergüenza que suponía una compra como ésa en su juventud. Decidió entonces sumar a la cesta unos chocolates, pan de sándwich y mermeladas para untar, un poco para disimular lo que sentía como una gran sinvergüenzura.
Se paró ante la caja número 7, al llegar entregó su cesta y en ese mismo instante la señorita le dice que la caja cierra, “Pero no se preocupe que se la paso a la caja 2 y no hace cola” y le informa a la cajera de la 2 en un grito:“EL SEÑOR DE LOS CONDONES ES EL DE LENTES Y BIGOTES” mientras le apuntaba con su índice izquierdo y un amuñuñamiento de labios señalizadores.
Ante la descripción voceada, volteé y en efecto era mi amigo. Había bajado la cabeza con lentes y bigotes mientras alzaba la mano y la vergüenza para que lo identificara la cajera de la 2.

-¿Afiliado?
-No señorita, no todavía.
-¿Desea afiliarse?
-No por ahora. Temió quedar marcado en el plástico identificador como el cliente de los condones y la cremita HOT.
Ella pasó el lector óptico por cada uno de los productos con destreza y los colocó, por categorías, en diferentes bolsas no sin antes hacer comentarios y recomendaciones que nunca sabremos si eran irónicas o de buena voluntad.

“Los chocolates separaditos del HOT, no sea que se le derritan”
“El pan con las mermeladas para que a la hora de untar no se me confunda”

La verdad es que no puedo decir que pasear por Locatel sea aburrido…


Nicolás Baselice Wierman.
@nbaselice en twitter
Instagram @nbaselice
Mayo 2012.





Todos los PodCast de YdeashoyRadyo

Followme_230x40_white

Curiosea nuestras gavetas

Comentarios-Opiniones-Saludos

Lo más visto en 30